La Verdad Sobre los Jabones naturales – Guía Completa
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El jabón es uno de esos productos que usamos a diario desde que tenemos memoria y que siempre están ahí. Son un producto tan rutinario que la mayoría de las veces no le damos la importancia que se merecen, los damos por hecho. Desde hace mucho tiempo, por comodidad o precio, mucha gente se ha pasado del jabón clásico al jabón líquido genérico. No obstante, hace unos años, hay una tendencia que está naciendo y haciéndose cada vez más popular: los jabones naturales.
Esta vuelta a lo tradicional tiene una historia y unos motivos detrás, pero primero vamos a ver en qué consisten los jabones naturales.
¿Qué es un jabón natural?
Los jabones naturales son, en general, pastillas de jabón normales y corrientes. Si se los ve a simple vista, son iguales a los jabones industriales. Pero la diferencia está exactamente ahí, en la fabricación. La mayoría de estos son jabones artesanales, ya sea hechos en casa por nosotros mismos o por pequeñas marcas que los fabrican.
Sus ingredientes son naturales y fáciles de conseguir, respetuosos con el medio ambiente y de muy buena calidad. Esto explica también su precio. Si vamos a comparar el precio de los jabones industriales con los de jabones naturales ecológicos, vemos que estos últimos son más caros. La explicación es simple: producir jabón en masa y con productos sintéticos, es mucho más económico que la producción de jabones artesanales, que suele ser más lenta y limitada.
De todas formas, no hay nada más barato que hacerlo uno mismo. Si quieres averiguar cómo hacer jabón, no es mucho más difícil que hacer un bizcocho: solo necesitas aceite, agua y sosa cáustica. Se mezclan teniendo mucho cuidado, se meten en un molde y se dejan reposar. Encontrarás muchas recetas de jabones naturales caseros y muchas páginas web que te explicarán en detalle cómo hacer jabones caseros naturales con distintos aceites para hacerlos a tu gusto, pero la base de toda receta siguen siendo esos tres ingredientes.
5 Beneficios de los jabones naturales
Las propiedades de los jabones naturales son muchas, pero vamos a remarcar cinco que creemos son las más importantes:
- Aceites naturales: muchas de las recetas de jabones naturales tienen aceites esenciales y están hechos a base de aceite de coco, de oliva o de palma. Estos aceites tienen muchas propiedades y vitaminas que además de ser antialérgicos, son ideales para personas con la piel sensible. Además, son un gran remedio contra el acné y otras enfermedades de la piel que pueden causar irritaciones.
- Sustancias naturales: los jabones naturales caseros o artesanales sólo utilizan productos 100% naturales. No se utilizan conservantes ni colorantes artificiales. No obstante, existen colorantes de origen natural para jabones que cumplen la misma función que los sintéticos, pero siendo ecológicos y naturales.
- Económicos: Si, anteriormente hemos dicho que su precio es mayor que los industriales, pero a la larga los jabones naturales son más económicos. En primer lugar, porque limpian igual consumiendo menor cantidad. En segundo lugar, porque son multiusos, puedes usarlos para el pelo, la cara y el cuerpo sin necesidad de tener varios distintos.
- Ecológico: al utilizar jabones naturales estamos seguros que es un producto ecológico, hecho con ingredientes que no dañan el medio ambiente ni la capa de ozono. La mayoría de los jabones artesanales también tienen envoltorios hechos con material reciclado y reciclable. Por tanto, los jabones naturales además de cuidar nuestra piel, también cuidan nuestro entorno.
- Hecho a mano: si habéis visto cómo hacer jabones caseros naturales y os habéis atrevido a intentarlo, seguramente se os haya quedado una sensación magnifica. Saber que un producto tan importante esta hecho por ti, con tus propias manos y a tu gusto te deja una sensación de satisfacción enorme. Si además te hace bien a ti y a lo que te rodea, mucho más.
Tipos de jabones naturales
Al igual que con los jabones industriales tradicionales, existen muchos tipos de jabones naturales para todos los tipos de pieles.
- Jabón duro: es el jabón clásico y el más básico. El ser tan simple hace que sea apto para todo tipo de pieles y que sirva para la piel, el pelo y la cara, siendo igual de bueno en los tres.
- Jabones de glicerina: si padeces acné o tienes la piel grasa, una gran solución son los jabones de glicerina. Estos son jabones para la cara que tienen agentes que limpian tu piel, cierran los poros y alivian las irritaciones.
- Jabón negro: también utilizado para la gente con acné ya que son jabones exfoliantes naturales. No obstante, poca gente sabe que sirven también para cuidar y dejar más suave el pelo.
- Jabón de Castilla/Marsella: clásicos jabones naturales que tienen ingredientes de los lugares que le dan nombre. Estos dos son muy similares, ambos cuidan de la piel y son recomendados para los recién nacidos. La principal diferencia son algunos aditivos que se le añaden al jabón de Marsella, como la lavanda, que le dan un aroma particular.
¿Cuáles son los mejores jabones naturales?
No existen los mejores jabones en general. Cada uno atiende a las necesidades y características de la piel de cada persona. El mejor jabón es aquel que es apto para tu piel, que limpia y que cumple con lo que necesitas. Por tanto, los mejores jabones dependen de tu elección.
Puedes guiarte por las marcas más vendidas o por comentarios que puedas leer en internet, pero siempre ten en cuenta si son específicos y si se adaptan a tus necesidades. Además, cada uno tiene sus propios gustos y preferencias a la hora de aromas o formatos. Por suerte hoy en día encontramos una gran variedad de marcas y jabones naturales que harán que buscar el jabón adecuado no sea difícil.
Ahora que ya sabes cómo se hacen los jabones naturales, los beneficios que tienen respecto a los industriales y los tipos que hay, solo te quedan dos opciones: o buscar y elegir la opción que mejor se adapte a ti o animarte y lanzarte a fabricar tu propio jabón natural casero artesanal.